13- D. FIDEL RAMOS Y VALDEZ (NACIDO EL 18 MARZO 1928), EL PRESIDENTE METÓDICO Y METODISTA.


No hacía ninguna falta ser católico cerrado para extrañarse de cómo una católica, supuestamente cerrada como la Presidente Cory C. Aquino, pudiera endosar en (1998) como su candidato presidencial, y sucesor, a un individuo como Fidel Ramos y Valdez.

Bien debiera saber la Cory que para muchos filipinos, ser Protestante, y de los “United Methodist” además, es dejar de ser filipino. Pero dejemos de lado esta “diferencia”. Después de todo bien se puede decir, por el otro lado, en que la Cory C. Aquino, estaba sumida, en esos momentos del endoso, fue le de un espíritu puramente “ecumenista” según las instrucciones del imperante neocolonialismo en inglés.

Está el otro hecho de que Fidel Ramos es primo de segundo grado de Ferdinand E. Marcos, al que ella acusaba de haber mandado asesinar a su marido, Benigno Ninoy Aquino. ¿Cómo se pudo olvidar de ese significativo detalle o pormenor?.

Otra consideración que también debemos tener en cuenta es el hecho de que Fidel V. Ramos era un alto militar en el gobierno de “marshall law” del Presidente Ferdinand E. Marcos. Y lo fue en varias capacidades militares durante más de veinte años. De hecho, Fidel V. Ramos era el Alto Comandante de la Costabularia “Philippine” durante la vigencia de la ley marcial del Presidente Marcos. El Secretario de Defensa durante ese mismo tiempo era Juan Ponce Enrile.

En resumidas cuentas, Ramos con Ponce Enrile, eran los carceleros de Benigno Ninoy Aquino. No son pocos los corystas que dicen que “Cory C. Aquino, como viuda de éste mártir no debiera de haber tratado ni con Ramos ni con Ponce Enrile”.

Pero el neocolonialismo WASP usense sobre Filipinas tiene a sus esbirros dentro del actual tinglado que sobrecoge a todo el actual gobierno filipino y a todos los que se involucran en él. Y es por eseo que cuando el Presidente Ferdinand E. Marcos ya les era intolerable a los intervencionistas WASP usenses, éstos se valieron de Ramos y de Ponce Enrile para traicionarle, aunque estos dos personajes eran del inmediato “círculo del poder” del mismo Marcos.

En nada sirvió el hecho de que Ponce Enrile y Ramos ambos fuesen ilocanos como Marcos puesto que a la menor indicación del colonialista WASP usense, esta pareja no vaciló en alzarse contra Marcos atrincherándose en los Campos militares de Aguinaldo y Crame para declarar un golpe de estado en su contra.

Otro que quiso hacer el papel de esbirro del neocolonialismo WASP usense en Filipinas fue el Cardenal Jaime L. Sin, el Arzobispo de Manila, que por la Radio Véritas llamó al pueblo católico para que se concentre por miles en la avenida EDSA de circumvalació n de Metro Manila, (avenida que corre entre los dos campos militares mencionados) . El incauto pueblo católico allí concentrado tenía por supuesta meta proteger con sus cuerpos a los dos “atrincherados”. Entre ese “pueblo” estaban monjas, sacerdotes y seminaristas jóvenes.

Desde luego que el Cardenal Jaime L. Sin también participó en esa rebelión porque ya se sabía que le cogió manía a la primera dama Imelda Marcos. Y es porque ésta había hecho algunos comentarios sobre sus entromisiones en la política filipina. Y aunque Imelda tendría una buena base legal para hacer esos comentarios sobre la separación de la iglesia y el estado, el Cardenal dijo que se entrometía en la política porque no dejaba de ser filipino. Verdad. Era filipino de hecho. Pero siendo religioso no pagaba los usuales impuestos del ordinario votante. De todos modos, la intervención del Cardenal favoreció, a la postre, a nadie más que al neocolonialismo White Anglo-Saxon Protestants usense sobre Filipinas. También favoreció, desde luego, a las ambiciones políticas de Cory C. Aquino, aunque a la larga, perpetró un terrible daño al concepto justo de la independencia filipina amén de sus economías, y sus derechos humanos. Como resultado de esa intervención del Cardenal Jaime L. Sin, la inmensa mayoría del ahora empobrecido pueblo filipino vive castigado por los altos costos confiscatorios de la electricidad de la Meralco, la gasolina de la Shell, la Caltex y la Petrón, además de la medicina, el alimento y todas las demás necesidades de la vida corriente.

Este trasfondo contencioso y costoso para la generalidad del pueblo filipino también le favoreció a Fidel V. Ramos en sus ambiciones políticas porque, a pesar de ser Protestante, estaba llevando acuestas una imagen de la Virgen de Fátima. Desde luego que no faltó algún observador que dijo que la imágen de la Virgen de Fátima nos la estaba usando, el referido Ramos, como “un ídolo anito prehispánico” de Filipinas porque la utilización de la simbología católica en un golpe de estado, estrictamente político, tenía que ser toda una blasfemia. Y esa misma blasfemia más se acentuó cuando luego se inventó a la “Our Lady of EDSA”, una supuesta imágen de la Santísima Virgen María, la Madre de Jesucristo, pero con el rostro ordinario de la Sra. Cory C. Aquino. Por esta obvia invención del Cardenal L. Sin y hasta de Ramos, muchos católicos perdieron la fe en la sinceridad del clero filipino, tanto sacerdotes como monjas, que se acostumbraron a meterse en controversias de partidismo político donde no les incumbe figurar. Hubo hasta sacerdotes que cobraban impuestos para el gobierno de la Sra. de Aquino. Nagpapapel. Eso quiere decir que, ahora, la Iglesia Católica de Filipinas, en su clero local, quiere desempeñar un papel político, y hasta burocrático, que no le pertenece.

El terreno donde debiera meterse el clero católico es en el de la docencialidad y la ilegalidad antipedagógica de imponer el inglés como único medio de instrucción, incomprendido por niños filipinos que no nacen hablando este idioma extrajero. Antes que el inglés, lo que debiera usarse para educación de los incautos niños en la primaria y en la elementaria, particualrmente en escuelas y colegios católicos de Filipinas, son los idiomas indígenas de estas islas. Pero es este mismo clero el que ni se percata del daño pedagógico que el inglés obligatorio hace en el desarrollo de niños incautos de este país. Y asi ocurre, porque el clero filipino de hoy está pecaminosamente americanizada en su formación en los “nuevos seminarios” donde sus maestros ya desnacionalizados, no les hablan ni en español, ni en tagalo, sino nada más que en inglés.

Se ha descubierto además en estudios muy recientes que son muchos los seminarista sin verdadera vocación religiosa los que se meten en esos seminarios porque tan solamente aspiran pasarse a vivir en EE.UU. como cualquier otro filipino indebidamente sajonizado. Y es porque, a diferencia del clero que había en estas islas durante el tiempo español, los de ahora han aceptado ser, a sabiendas o no, esbirros de una potencia Protestante que luego, en nombre de la democracia malentendida, les va despistando. Cuando el gobierno neocolonial les vaya quitando, en lo sucesivo, a las órdenes religiosas y al clero en general, todas las propiedades y bienes que sus antecesores españoles les legaron para su actual comodidad y holganza mundanal, queda la posibilidad que entren en razón y repudien el idioma inglés obligatorio y todo este explotador neocolonialismo que contrae su “mis-education”.

Pues bien, Fidel V. Ramos presentó su candidatura para Presidente de Filipinas, pero a pesar de su supuesta popularidad entre los neocolonialistas WASP usenses, el pueblo no le votó mayoritariamente. Al principio Fidel V. Ramos era miembro del Partido LDP (Lucha del Filipino Democrático o Laban ng Demokratikong Pilipino.) Pero cuando declaró su candidatura para Presidente, los miembros de este partido no le eligieron. Eligieron al entonces vocero de la Cámara de Representantes Ramón Mitra, hijo. Dias después de perder estas elecciones de partido, Ramos dimitio del LDP y formó su propio partido político, el Lakas ng Tao (People Power Party-Partido del Poder del Pueblo) por el que declaró su canditatura preidencial teniendo al cebuano Mario Osmeña de candidato vicepresidencial. Siendo políticamente débil, Fidel V. Ramos se vio obligado a formar una cualición con el partido político fundado por otro vocero de la Cámara de Representantes, José de Venecia, que, como él, es también oriundo de la misma provincia de Pangasinán.

El partido politico fundado por José de Venecia es NUCD (National Union of Christian Democrats-Union Nacional de Demócratas Cristianos) que, a su vez, se unificó con la UMDP de Simeón Datumanong, (United Muslim Democrats of the Philippines- Demócratas Musulmanes Unidos de Filipinas). Pero cuando terminaron las eleciones entre sendos candidatos presidenciales, Fidel V. Ramos, obtuvo tan solamente el 23% de los votos. Su vicepresidente perdió la vicepresidencia ante el que luego sería el Presidente del país después de Ramos, Joseph Ejército Estrada. Desde luego que no faltaron comentarios insinuando que Fidel V. Ramos se ganó la presidencia, con los usuales fraudes electorales que bien explica su margen bien pequeña.

La popular candidata presidencial hoy senadora Miriam Defensor Santiago hasta ahora declara que Ramos la engañó en aquellas elecciones. Con este resultado electoral, el neocolonalismo WASP usense consiguió que Filipinas, por primera vez, tuviera un Protestante de Presidente en contra de la voluntad de la mayoría católica que no le dio el voto porque le miraban como otro pro-americano dispuesto a endeudarles más y más a los conocidos bancos prestamista que imponen sus deseos egoistas sobre paises deudores como Filipinas.

Aunque nació el 28 de marzo de 1928, los padres de Fidel Ramos y Valdez no preservaron nada de la tradicional cultura filipina en su familia. Al abrazar el Protestantismo se americanizaron casi por completo aunque su padre, Don Narciso Ramos (1900-1986) conocía el idioma español.. Tenía que hablar español porque la Cámara de Representantes al que perteneció durante veinte, años aun deliberaba en este idioma. Su pro-usensismo le facilitó luego el alto puesto de Secretario de Asuntos Exteriores ya que, como queda denunciado por el senador Claro M. Recto, los asuntos exteriores de Filipinas estaban controlados por el Departamento de Estado en Washington D.C..

Los seguidores de Fidel V. Ramos alegan que Filipinas registró un crecimiento rápido en el terreno de las economías. Pero este alegación también queda desmentida por otros analistas que califican dicho crecimiento como insignificante o como “una mentira”. Se le censuró a Ramos por ser, hasta entonces, el presidente que más viajes al extranjeró se dió. También se le registra como el candidato más anciano que subió a la presidencia del país.

La crítica falta de electricidad que empezó durante el desgobierno de la Presidente Cory C. Aquino recrudeció durante la tenencia del Presidente Ramos. Según sus analistas la demanda por electricidad no podía quedar satisfecha por las ya viejas plantas eléctricas del país. La mayoría del pueblo filipino, víctima de casi interminables apagones, señaló que el Presidente Ferdinand E. Marcos tenía razón al mandar construir la Planta Nuclear en Bataan para suministrar de electricidad barata al ahora oscurecido país. A raiz de esta murmuración, en enero 27 de 1992, Ramos pidió al Congreso que apruebe la creación, por ley, de un Departamento que produzca electricidad o energía eléctrica.

El Congreso, influido por los interesados WASP usenses, no tan solamente creó el citado Departamento de Energía sino que le concedió al Presidente Ramos hasta poderes dictatoriales de emergencia para solucionar la crisis de electricidad. Valiéndose de dichos poderes dictatoriales y de emergencia, Ramos expidió licencias a favor de productores independientes de electricidad (IPP) para que levanten plantas dentro de solamente dos años con contratos pagaderos por el gobierno filipino en dólares usenses. Mas, cuando sobrevino la Crisis Financiera del Este del Asia (East Asian Financial Crisis) el peso filipino perdió la mitad de su valor ante el dolar usense y esta es la razón por el que la electricidad en Filipinas es hoy la más cara en todo el Extremo Oriente.

Más que economista el Presidente Fidel V. Ramos fue educado para ser un militar. En 1946 se matrículo en la Academia Militar de Filipinas o “Philippine Military Academy”. De esta academia salen, hasta ahora, todos los que han de ocupar altos puestos en el ejército filipino. Pero siendo hijo de un viejo Secretario de Asuntos Exteriores, tenido como muy leal a los EE.UU., Ramos logró becas en la United States Military Academy (Academia militar usense) en West Point de donde se graduó en 1950. Cursó la inginiería civil en la Universidad de Illinois, EE.UU. donde disfrutaba de una beca en 1951. En 1960 completó un curso de espionaje pro-usense en la United States Army Infantry School en Fort Benning. Muchos señalan este pormenor como su preparación para ser un agente más de la CIA, o la Agencia Central de Inteligencia (espionaje) de EE.UU. en Filipinas.

Aunque es verdad que Fidel V. Ramos llegó a participar en la Guerra Coreana (Korean War) como cabeza de un pelotón de la Fuerza Expedicionaria Filipina a Corea (PEFTOK), aconteció que como Jefe de Estado Mayor del Grupo Filipino de Acción Civil enviado al Vietnam entre 1966 y 1968, se le señaló como un soldado que nunca luchó en ninguna frente de batalla. Esa “acusación” persistía a pesar de que, luego, también fuese condecorado con una cruz de oro por la Legion Filipina del Honor.

Pero la “acusación” persistía, aunque su conocimiento tan solamente se limitaba en el usual molino de secretos a voces. Pero, no tardó en llegar ese rumor a las columnas de la prensa local, al parecer desafecta a él. Y en dicha prensa local, se informó que Fidel V. Ramos “es un soldado incompleto” porque “nunca experimentó lo que es una verdadaera batalla militar”. Esta alegación en su contra le enfureció sobremanera y censuró severamente a los periodistas que publicaron esta “patraña”.

Por otro lado, para estar a tono con la agenda neocolonialista en contra de la Iglesia Católica de Filipinas, Fidel V. Ramos, a sabiendas o no, resucitó el tema sobre el heroismo de José Rizal como víctima de la “frailocracia”.. Por primera vez después de tantas décadas, salieron opiniones del pueblo en contra de José Rizal como “héroe masón y anticatólico inventado por los Protestantes norte-americanos”. Se añadió además que les era preciso “reinventarle” a José Rizal “para encubrir las atrocidades WASP usenses durante su invasión de Filipinas en 1898” contra los ciudadanos de la Primera República de Filipinas. Aquella invasión WASP usense de Filipinas terminó masacrando a la sexta parte de la población filipina, o sea: ----casi seis millones, (según el historiador usense Mr. James Goodno), de una población de casi diez millones (en aquel tiempo), que se resistía a la insolicitada “americanización” y a la “democracia en idioma inglés”.

El filipino de hogaño, según un joven historiador apellidado Ileto, se ha olvidado casi por completo de ese genocidio de civiles filipinos que defendían su Primera República invadida por EE.UU. pero que muy bien se acuerda del fusilamiento de José Rizal. Y es porque el régimen norteamericano le inventó a José Rizal como héroe nacional de Filipinas olvidándose del hecho de que los que le mandaron fusilar al mismo José Rizal, esta vez según otro historiador, fueron los mismos masones filipinos que atestiguaron en su contra ante el Consejo de Guerra del Gobernador Camilo Polavieja de 1896. Ese otro historiador filipino no es nadie más que Leon María Guerrero, autor del libro “The First Filipino” (El primer filipino).

Pero mientras se exhonera, mediante el olvido impuesto, las atrocidades y masacres WASP usenses contra los filipinos que defendían su República Filipina de 1896 y 1898, se le sigue culpando a España por el fusilmiento de José Rizal hasta la fecha. Eso a pesar del perdón que pidió el Presidente Felipe González, de España, al pueblo filipino durante su visita oficial a la Presidente Cory Aquino en 1987.

En resumidas cuentas, los filipinos sensatos de nuestros días tan solamente se acuerdan de José Rizal como un “novelista masónico y anti-fraile español” amén de buen poeta en lengua española. Algún que otro joven filipino inclusive dijo que si la pena de muerte fuese abolida en España en 1896, como ahora está efectivamente abolida, que José Rizal nunca hubiese sido fusilado. Desde luego, se añade, que si José Rizal hubiera sobrevivido el fusilamiento del 30 de diciembre de 1896, los invasores WASP usenses se hubiesen encargado, de todos modos, de fusilarlo o mandarlo matar a escondidas (salvaging), puesto que patriota como es, José Rizal estaría al frente contra el invasor WASP usense juntamente con los Generales Antonio Luna y Artemio Ricarte luchando en contra del ejército invasor de EE.UU..

Al enterarse del rumbo anti-Rizal y anti-masonerí a, amén de anti-Protestante, que la cuestión sobre José Rizal empezó a tomar, el Presidente V. Ramos empezó a alejarse de este tema. Su postura a favor de la pena de muerte no coincidía con ninguna de sus lamentaciones en contra de la pena de muerte dada a José Rizal en 1896. Pues, es un hecho que mientras la España de hogaño ya tiene abolida la pena de muerte, EE.UU., “la madre patria del Presidente Ramos” la mantiene rigorosamente vigente hasta en el tiempo presente en pleno nuevo milenio.

El Presidente Fidel V. Ramos también quería, por supuesto, quitarse de encima el mote de “Amboy” (American Boy) ya que se sospechaba inclusive que siempre fue un “American Citizen” disfrazado de Filipino. Para demostrar su filipinidad, dicen sus biografos wikependistas, quiso revivir “el espíritu nacionalístico” mediante la organización de una campaña masiva para la celebración del “centenario de la independencia filipina de España” el 12 de junio de 1989. Durante esa proyectada celebración se crearía, otra vez, la oportunidad para atacar “a los opresores españoles”, a la “enseñanza innecesaria del idioma castellano” y “lo retrasado que es el dogma de los católicos romanos razón por el que los filipinos son pobres, retrasados y supersticiosos”… Y de hecho se había montado todo un tinglado para lanzar el consabido ataque. Pero lo que frustró todos estos ataques fue la introducción en televisión filipina de los culebrones mexicanos doblados al tagalo. El culebrón que cautivó por completo a las masas filipinas fue “Marimar” donde figura la artista Talía Sodi Miranda. Las masas filipinas, entretenidas y fanatizadas por el cuento de “Marimar” no hicieron ningún caso la conmemoración centenaria de “la declaración del independencia de España”. Y el mismo Presidente, al parecer, también se olvidó de esa conmemoración centenaria. De hecho, Fidel V. Ramos visitó México y a España. Y, Talía vino a Filipinas dos o tres veces y fue recibida de forma tan espectacular que hasta el mismo Ramos quiso hacerse méritos por traerla a estas islas. Cunado todo terminó, nadie hizo caso de los ataques sectarios que se programaron contra España. No duró y el mismo Fidel V. Ramos en su visita a España pudo establecer, al parecer, “una amistad profunda” con el Rey Juan Carlos y con la Reina Sofía.

Tras el fracaso de la proyecatada emboscada a la herencia hispana de Filipinas, como una venganza de los burlados hispanófobos, cargos y acusaciones de corrupción fueron lanzados en contra del Presidente Fidel V. Ramos por la malversación de fondos destinados a varios proyectos conmemorativos de esta efeméride. Entre los proyectos relacionados a este centenario afectados por la supuesta malversación y robo de fondos se encuentra el del CENTENIAL EXPO y el de un Amfiteatro en la anterior base aera usense en la Ciudad de Ángeles, Pampanga. Estos proyectos terminaron siendo controversiales hasta después de muchos años porque se perdió, ----desaparecieron- ---, nada menos que Nueve Billones de pesos o el 1.7 por ciento del presupuesto nacional de 1998.

A guisa de proponer cambios constitucionales para Filipinas a fin de que sea “este país” supuestamente más competetiva económicamente, más globalizada, más fácil de gobernar, el Presidente Fidel V. Ramos sugirió que el gobierno empiece cuanto antes con un proceso encaminado hacia la enmienda de la Constitución Cory de 1987. Las enmiendas para esta Ley Orgánica, según él, tenían que completarse en el año 2007.

El Presidente Fidel V. Ramos apoya la transformació n del sistema polico actual, (que es presidencial y bicameral), a otro que sea parliamentario y unicameral camino hacia un sistema federal a la postre. Este apoyo, por él expresado, levantó muchas sospechas porque se veía, en esta propuesta suya, un vehículo por el que Ramos podría continuar su intervención extra-legal en asuntos del gobierno filipino. En otras palabras, se le veía al Presdiente Ramos como nada más que un agente de Estados Unidos dentro del gobierno filipino.

Las enmiendas que él proponía a la citada constitucion Cory de 1987 también parecían estar enderezadas a frustrar de antemano cualquier enjuiciamienta en contra de él, en lo sucesivo, por las desaparicienes de fondos del gobierno en grandes y sonados escándalos de corrupción sobre las varias transacciones relacionadas al referido Centennial Expo, la transacción ruidosa sobre el “PEA-Amari” y las transacciones que su administració n hizo con la Benpres-North Luzon Expressway donde millones de fondos públicos cambiaron de mano.

El Presidente Ramos intentó de hecho cambiar la Constitución del país mediante un proceso conocido como “Cha-cha”. Una protesta organizada por su predecesora, Cory C. Aquino y le Iglesia Católica encabezada por le Cardenal Jaime L. Sin puso fin a este proyecto suyo. Todos se convencieron que Ramos quería cambiar la constitución para perpeturase en el poder.. .

Si hemos de creer el testimonio del asistete auxiliar del Clark Development Corporation ante el Comité Azul del Senado, Ramos tenía miedo que el siguiente Presidente del país le mande a la cárcel por la corrupción que supuestamente caracterizó su gobierno y es por eso que cuando Joseph Ejército Estrada de hecho ganó la presidencia en las elecciones de 1998, Fidel Ramos fue instrumental en la organización de la supuesta revolución EDSA DOS que le puso a la entonces vicepresidente Arroyo en el poder tras deponerle al Presidente Estrada para evitar que éste, de hecho, le enjuicie.

Bajo la Presidente Gloria M. Arroyo, Ramos se sentía seguro. Sorprendentemente, la revolución EDSA DOS fue descrita por el International Herald Tribune y el New York Times “como un golpe de estado antidemocrático producido por Ramos, Cory C. Aquino y el Arzobispo de Manila, el Cardenal Sin juntamente con una coalición de negociantes oportunistas y grupos de la izquierda”. El Presidente Estrada nombró un cuerpo invetigador tras acusarle a Ramos de conspirar en su contra y mandó investigar el papel de Ramos en el escándalo en torno del CENTENNIAL EXPO.

Para la mayoría de filipinos, el Presidente Fidel V. Ramos demostró ser un Presidente inmerecedor de la confianza del pueblo. Muchos recordaron la desconfianza que el Presidente Marcos le tenía durante todos los años en que estuvo en el poder. En vez de hacerle su mano derecha, el Presidente Marcos prefirió confiar en el General Fabián Ver.

Pero Ramos es ahora uno de los hombres más ricos de Filipinas. Mientras concluimos esta biografía suya, ya tiene ochenta y un años bien cumplidos.

Autor: D. Guillermo Gómez Rivera.

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